Proyecto seleccionado como ganador en un concurso restringido derivado de una llamada a proyecto, por un jurado compuesto por Nacho lavernia, Pati Núñez, Alberte Permuy y miembros del Ministerio de Cultura. El jurado destacó en el acta que «el concepto en el que se basa: una visión de las bibliotecas como lugar (frente al “no lugar”), como espacio seguro, amigable, donde suceden cosas que incluyen a todos. Una idea fuerza muy coherente con el posicionamiento real de las bibliotecas en España». La idea, en respuesta al briefing era representar las bibliotecas, que no los libros, las bibliotecas actuales con contenido y actividades diversas, como lugar en el que permanecer y abierto a todos los públicos.